TRANCENDER CON LOS CRISTALES

La visión de gema y especialmente de un cristal nos abre internamente de forma similar a la sensacion mágica y transcendente que sentimos al observar una noche estrellada. La visión del universo nos expande y la visión de un cristal nos abre a la parte mas profunda de nuestro ser.

Todo lo existente vibra y tiene su propia esencia o alma. Los humanos, al interactuar con los cristales, nos abrimos por analogía a esa parte transcendente y espiritual que forma parte de nuestra naturaleza humana. Los cristales son entes dimensionales, aperturas a nuevas energías, espacios de luz y color, potenciadores de otras percepciones y realidades.

Todo vibra, luz, color, sonido, forma, son las notas de esa gran creación cuya lectura esta abierta a nuestra experimentación. El ser humano y su capacidad innata de trascender, posee a su vez la posibilidad de interactuar conscientemente. Los cristales se convierten en ese instrumento mágico lleno de poder y armonía que permite afinar nuestra propia esencia cristalina.

Las distintas técnicas de meditación, relajación y visualizacion son las herramientas básicas con las que podemos interactuar con los cristales. Existe mucha y variada información al respecto, sin embargo los cristales nos permiten agudizar nuestra imaginacion y sumar a esas técnicas otras nuevas formas de interactuar.

La naturaleza y sus potentes energías son el templo mas sagrado que nos puede servir de escenario en es nueva forma de relacionarnos y interactuar con los cristales.

EJERCICIO A LA ORILLA DEL MAR :

La orilla del mar es el espacio mágico donde se unen la fuerza marina y la potencia de la tierra. Justo en ese espacio de poder de energías de viento, agua con su oleaje  el canto de las olas y la energía solar forman una formula mágica y alquímia de gran poder. La riqueza de iones negativos que posee este lugar nos abre el espíritu y los rallos de sol iluminan nuestro ser. Sentados o estirados en la orilla del mar, cogeremos un cristal de cuarzo entre nuestras manos.

 Dejaremos que el agua espumosa bañe nuestro cuerpo. Nuestro espíritu lentamente emergera con sorpresa, despertando de su largo letardo. Nuevas notas llegaran a nuestros oídos, la dulce brisa nos acariciara la piel y alimentara nuestro espíritu. Nuestro cristal potenciara todas las energías de la naturaleza y nos permitirá vivenciar intensamente todo su mensaje. Nuevas realidades sutiles y cristalinas llegaran a lo mas profundo de nuestro ser, donde el tiempo dejara de existir y sabremos que somos seres cristalinos y que nuestra naturaleza es irradiada continuamente. Al igual que los cristales necesitamos potenciarnos, cargarnos y brillar con nuestra autentica luz, irradiando todos nuestros colores del arco iris.

EJERCICIO EN LO ALTO DEL RISCO:

Esa lenta ascensión, ese largo camino de vida que nos lleva al momento presente. Justo ese momento en el que nos detenemos y pensamos. Ya estoy aquí y ahora me detengo y miro a  mi horizonte. En lo alto del risco podemos ver los 360 grados de nuestro alrededor,tener una visión completa de todo nuestro entorno. la visión externa y la lejanía nos producirá el efecto contrario: abriremos ese otro lado del espejo y la imagen se invertirá visionando toda nuestra realidad interior.

 Nuestra visión exterior nos mostrara la belleza armónica de la naturaleza. Nuestra visión interior se abrirá armonizada por el cristal a otra dimensión trascendente en la que todos interactuamos. Nuestra existencia se nutre de vivencias que van marcando nuestro camino. El cristal potencia la integracion de todo lo vivido y experimentado. Nuestros pies fuertemente arraigados a la tierra resonaran con nuestro cuerpo energético, que se expandirá como una mariposa que abre sus bellas alas mostrando todas sus tonalidades. La respiración, el aire que entra en nuestro cuerpo, nos expande y vivifica, armonizando nuestra naturaleza divina con nuestro cuerpo.

 Percibiremos el fuerte viento en nuestro rostro y nos sentiremos bañados por la vida y vibrando con todo lo existente. Nuestro cuerpo energético se expandirá hasta alcanzar el lejano espacio percibiendo la fuerza y el magnetismo de los planetas y la energía del universo.