La Leyenda Del Hilo Rojo Del Destino

 

Cuenta la leyenda que desde tiempos ancestrales los dioses cuando  nacemos nos colocan un fino hilo rojo, conectándonos con otras personas, personas que debemos conocer,  personas que debemos ayudarnos en un momento concreto y de una manera determinada. A esto se le conoce como la "Leyenda Del Hilo Rojo".

Según nos cuentan las leyendas orientales, las personas estamos destinadas a conocernos, inevitablemente conectadas por un hilo Rojo invisible, un hilo que nunca desaparece, un hilo que permanece atado a nuestros dedos a pesar del tiempo y la distancia. No importa el tiempo que tardes en conocer a esa persona,  no importa el tiempo que pases sin verla, ni siquiera importa si vives en la otra punta del mundo,  el hilo se estirara hasta el infinito pero nunca se romperá,su dueño es el propio destino.

Una de esas historias, probablemente contada de generación en generación desde hace milenios,  dice que desde hace mucho tiempo un emperador se enteró de que en una de las provincias de su reino, vivía una bruja muy poderosa, quien tenía la capacidad de poder ver ese hilo rojo del destino y la mandó a traer a su presencia. 

Cuando la bruja llegó, el emperador le ordenó que buscará el otro extremo del hilo que llevaba atado al dedo meñique, y lo llevara ante la que sería su esposa. La bruja accedió a esta petición comenzó a seguir y seguir ese hilo....esta búsqueda los llevó hasta un mercado,  donde una pobre campesina con un bebé en los brazos ofrecía sus productos. 

Al llegar hasta donde estaba esta campesina,  se detuvo ante ella y la invitó a ponerse de pie, hizo que el joven emperador se acercará y le susurro al oído: " Aquí, aquí termina tu hilo". Pero al escuchar esto el emperador enfureció creyendo que era una burla de la bruja. Este empujó desdechado a la campesina que aún llevaba a su pequeña bebé en sus brazos y la hizo caer, haciendo que esta pequeña se hiciera una gran herida en la frente. 

Más tarde ordenaría a sus guardias que detuvieron a la bruja y le cortarán la cabeza.

Muchos años después, llegó el momento en el que ese joven emperador de antaño debía casarse y su corte le recomendó que lo mejor era que desposara a la hija de un generamos poder, acepto llegó el día de la boda.

En ese momento el que por primera vez vería la cara de su futura esposa,  la cual entró al templo con un hermoso vestido y un velo que  la cubría totalmente. Al levantarselo, vio que hermoso rostro tenía una cicatriz muy peculiar en la frente. 

Esta leyenda está tan arraigada en las culturas orientales, que millones de personas llevan unidas a ellas un hilo rojo verdadero. No hay claridad,  no se sabe a ciencia cierta, sobre si el origen es chino ,japonés...se dice que la leyenda comenzó al conocer que la arteria lumbar conecta el dedo meñique con el corazón fuente de vida y eternamente concebido  con el hogar del amor.

De acuerdo a la leyenda, las dos personas conectadas por este hilo tendrán una historia importante sin importar el lugar,  el tiempo  o las circunstancias....el hilo rojo se puede enredar,  contraer, estirar...pero nunca se puede romper.